En la última procesión del Cristo Yacente del Santo Sepulcro y de la Virgen Dolorosa, el Viernes Santo, don Francisco Rosas Quispe recordó que el 24 de marzo de 1967, él y otros 11 entusiastas jóvenes católicos fundaron la Hermandad de los Caballeros del Santo Sepulcro de Huancayo, cuyo objetivo es propagar la fe en la crucifixión, muerte y resurrección de Cristo, sobre todo en Semana Santa.
Francisco, un hombre de 85 años, es el único con vida de aquel grupo que hace más de 50 años fundó la hermandad, que entre otras acciones, se encarga de cargar el anda del Cristo Yacente, en Viernes Santo, día que los católicos recuerdan la pasión y muerte de Jesús en la cruz.
La fraternidad tiene más de medio siglo de existencia. Ahora son 120 sus miembros. Entre los aportes que deja la participación de Francisco en la hermandad se encuentra la construcción de la cripta para la imagen del Cristo Yacente del Santo Sepulcro, en 1981.
También labores sociales de la hermandad en favor de pueblos alejados de la ciudad, que se encuentran en estado de pobreza, a quienes entregan víveres, vestimenta y artículos que necesiten.
“Hay instituciones religiosas que prefiero no mencionar que recaudan fondos pero no lo oficializan ni lo reparten”, dice Francisco con cierta desazón.