El plan de gobierno del alcalde de Huancayo, Dennys Mercurio Cuba Rivera prometía capacitar al 100 % de los comerciantes ambulantes y formalizar al menos al 80 %. Además, durante la campaña se anunció la creación de nuevos espacios para reubicar a los vendedores informales. Sin embargo, en el centro de la ciudad, el panorama dista de esas promesas. El comercio ambulatorio sigue creciendo, ocupa veredas y pistas, y no existen acciones sostenidas que contengan su avance.
El viernes 20 de junio, la Municipalidad Provincial de Huancayo colocó bloques de cemento en plena pista del jirón Ica con el objetivo de impedir la instalación de ambulantes. La medida duró menos de 48 horas. La noche del sábado, los bloques fueron tumbados por los propios comerciantes, y el lunes siguiente regresaron, liderados por la conocida ‘tía Rita’. Se reinstalaron delante de los bloques rotos e incluso usaron como respaldo para vender sus productos el camión azul de la Policía Municipal, de placa W3U-770, según constató Huanca York Times.

Ese día, el gerente de Promoción Económica y Turismo, Edwin Pérez Chamorro, declaró que la municipalidad “no avala la informalidad”. No obstante, un recorrido por el centro evidencia lo contrario. Varios tramos de los jirones Ica, Piura, Pachitea, Cajamarca y Atahualpa, así como parte de la avenida Ferrocarril, permanecen ocupados por ambulantes bajo la pasiva mirada de los policías municipales.
En estas zonas, no solo los vendedores informales, sino también los comerciantes formales han invadido veredas y pistas, lo que genera congestión y dificulta el paso peatonal y vehicular.
A pesar de lo prometido en campaña, el “nuevo orden comercial” no se ha implementado. Tampoco hay anuncios sobre reubicaciones ni estrategias de mediano plazo. Mientras tanto, el comercio informal reina en el corazón de la ciudad.
