La ciudad de Huancayo vibró con la energía de las mujeres juninas en una histórica reunión del Consejo Regional de la Mujer. Con la presencia destacada del Gobierno Regional, presidentas de las mesas de diálogo de la mujer de las nueve provincias y diversas instituciones aliadas, se consolidó un nuevo capítulo en la lucha por la igualdad de género. Este encuentro no solo fue un espacio de diálogo, sino un símbolo del compromiso colectivo hacia la construcción de un futuro más justo y equitativo para todas las mujeres de la región.
En un momento crucial para el movimiento feminista en Junín, Bernardita Vega lideresa asháninka de la provincia de Satipo fue reconocida oficialmente y acreditada por el Gobierno regional como la nueva presidenta del Consejo Regional de la Mujer de Junín. Su nombramiento marca el inicio de una nueva era de liderazgo y compromiso con la causa de la mujer.
Bernardita, reconocida por su trayectoria en defensa de los derechos humanos y su profundo conocimiento de las realidades de las mujeres en la región, asume la presidencia con la determinación de impulsar políticas públicas que aborden las principales brechas de género y garanticen una vida libre de violencia para todas las mujeres. Fueron acreditadas por el Gobierno regional y las 9 presidentas de las mesas de diálogo de la mujer y las secretarías técnicas presentes: Flora Tristán, Fovida y Filomena Tomaira.
La reunión también fue una oportunidad para reconocer la invaluable labor de Soledad Terrel, expresidenta del Consejo, quien durante su gestión impulsó iniciativas en beneficio de las mujeres de la región. Su legado se convierte en inspiración para las nuevas generaciones de lideresas. Soledad no solo promovió el empoderamiento de la mujer, sino que también creó espacios seguros para que las mujeres pudieran expresar sus inquietudes y necesidades.
Levantemos nuestras voces por la igualdad
El Consejo Regional de la Mujer de Junín se posiciona como un referente en la lucha por la igualdad de género. Su liderazgo, sumado al compromiso de todas las mujeres presentes en esta reunión, representa una fuerza imparable que busca transformar la realidad de las mujeres en la región.
Hoy más que nunca, es crucial que sigamos levantando nuestras voces por la igualdad. La lucha por los derechos de las mujeres es un camino que requiere el esfuerzo conjunto de todos los sectores de la sociedad. Es momento de fortalecer la colaboración entre instituciones, organizaciones y la comunidad en general para construir un entorno donde cada mujer pueda alcanzar su máximo potencial. La historia de Junín y su compromiso con la igualdad de género es una fuente de esperanza y un llamado a la acción para seguir adelante.