Un testigo declaró a la fiscalía que los atacantes del transportista Luis Carlos Chuquín Chávez, asesinado el 16 de agosto en Carpish (Huánuco), se referían a la víctima como “el cholo” y mencionaron a “Miguel Carlos”, identificado como Miguel Félix Beltrán Cueto, segundo al mando de la banda criminal “Los Buitres del Centro”, actualmente prófugo.
Según el testimonio, uno de los atacantes dijo: “El cholo se puso recio, le quiso quitar el fierro a Miguel Carlos”, en alusión a un forcejeo previo al crimen. Esta declaración fue clave para que el juez del Sexto Juzgado de Investigación Preparatoria dictara 18 meses de prisión preventiva contra Jean Pierre Ore Pino (23), de Chilca (Huancayo), y Juan Carlos Beltrán Cueto (33), de Tarma, dos de los cuatro detenidos por el robo de un cargamento de arroz y la muerte del chofer.
Durante la audiencia de prisión preventiva que culminó el miércoles, 10 de setiembre, la fiscalía sustentó que Beltrán Cueto golpeó con un objeto contundente a Chuquín dentro del camión, lo dejó inconsciente, lo ató y lo arrojó a un barranco. Ore Pino habría sido el conductor del auto que siguió al camión desde Tingo María y participó en el traslado del grupo.
Los otros dos detenidos, Pedro Miguel Torres Beltrán y Jhoner Rivera Rojas, quedaron con comparencia restringida mientras continúan las investigaciones. Su participación en el crimen no ha sido probada.
El vehículo utilizado por la banda, un auto plomo con lunas polarizadas y una cruz en el parabrisas, de placa CPB-196, fue intervenido el 19 de agosto en Tarma. Según la PNP, era el mismo auto que usaron para seguir al camión que transportaba cerca de 700 sacos de arroz desde Tarapoto hasta Lima.
Las investigaciones vinculan a los detenidos con “Los Buitres del Centro”, organización dedicada al robo de cargas en la carretera Central. Su presunto líder es Arturo Flores Santamaría, alias “El Viejo”, de Yanahuanca (Pasco), mientras que Miguel Félix Beltrán Cueto, también de Tarma, es el segundo al mando y está prófugo con orden de captura vigente, informó la PNP.
La fiscalía investiga a los detenidos por el delito de robo agravado con muerte, que puede ser penado con cadena perpetua.
