Los 15 sapitos rescatados por la policía ecológica cuando iban a ser licuados vivos en un centro naturista del mercado Mayorista de Huancayo fueron liberados por el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) en una de las reservas de agua del valle del Mantaro.
El 19 de marzo, la policía ecológica halló con vida a los batracios anfibios de la especie “Anaxyrus boreas”, o conocidos comúnmente como sapitos, en el interior de una bolsa de rafia en uno de los comercios situado entre los jirones Guido y Piura, listos para ser destrozados por la licuadora junto a otros ingredientes a pedido de clientes que beben como pócimas.
Batracios de diferentes tamaños y regular estado corporal fueron entregados a Serfor luego de ser rescatados en un operativo realizado para proteger a las especies silvestres sacadas de su hábitat”, manifestó el comandante Edgar Torres Villalobos, jefe de la Unidad Desconcertada de Protección del Medio Ambiente de Junín.
Posteriormente, fueron liberados por Serfor en un lugar cuyo nombre se guarda en reserva para proteger de los traficantes a la fauna y flora silvestre.
No hubo detención de quien tenía a los anfibios y el caso está en manos de la fiscalía ambiental.
El comandante Torres señaló que está en investigación el modo en que los batracios fueron sustraídos de la naturaleza y trasladados hasta el mercado.
Guardianes de la agricultura
“La ausencia de sapos en el ecosistema, afecta directamente a la agricultura, porque son controladores biológicos del gorgojo de los andes, moscas, polillas, arañas. También avisa si habrá lluvia o no. Una semana antes de lluvias se escucha su croar”, comenta el presidente de la Convención Nacional del Agro Región Junín, Fredy García Medina.
Para el dirigente del Alto Cunas: “los sapitos están en extinción por culpa de mafias que negocian con los sapos, por los agro tóxicos -usados por campesinos- que los matan, y por el cambio climático del 2008-2023. Antes se escuchaba y miraba sapitos, ahora es raro, ha decrecido el número”, afirma.
García Medina reclama penas severas para los traficantes y compradores de animales que están llevando a la extinción a las lagartijas, aves, sapos y ranas y convoca a la población a proteger y enseñar el cuidado de animales, en especial los silvestres, y también a la fauna.
Por su parte, el comandante Torres, precisó que “la ciudadanía y los comerciantes no toman conciencia que extraer a las especies de animales de su hábitat natural causa daño a los ecosistemas y a la extinción, hasta saben que es penado, pero insisten en estos delitos”.