El proyecto Quebrada El León es una obra de gran impacto y relevancia para los distritos de Huanchaco y La Esperanza en la región de La Libertad. Con una inversión pública significativa y un enfoque en la protección contra inundaciones, este proyecto beneficia actualmente alrededor de 45 mil trujillanos, ofreciendo seguridad y tranquilidad a comunidades que anteriormente estaban en riesgo de desastres naturales.
Un proyecto pionero bajo un acuerdo internacional
La Quebrada El León es el primer proyecto de protección contra inundaciones desarrollado en el marco del acuerdo de Gobierno a Gobierno entre Perú y el Reino Unido. Este acuerdo ha permitido la planificación, diseño, construcción e inauguración de la obra bajo la supervisión del equipo de entrega del Reino Unido (UKDT). El UKDT ha acelerado la implementación de infraestructuras de defensa contra inundaciones en 17 cuencas fluviales y 7 ciudades costeras de Perú, siguiendo estándares internacionales y promoviendo la sostenibilidad ambiental y la biodiversidad.
Hernán Yaipen, titular de la Autoridad Nacional de Infraestructura (ANIN), destacó la colaboración y el trabajo conjunto para proteger a las comunidades y forjar un futuro sostenible. “A través de la colaboración y el trabajo en sociedad, juntos estamos protegiendo a nuestras comunidades y forjando nuestro futuro. Empleos y formación de alta calidad, comunidades y empresas capaces de planificar e invertir en el futuro y una capacidad reforzada para diseñar, construir y gestionar infraestructuras modernas”.
Implementación y características del proyecto
El proyecto, que comenzó en junio de 2022, tuvo como objetivo principal proteger las zonas de riesgo del norte del país redirigiendo el exceso de agua desde las zonas elevadas hacia el mar. Liderado por la ANIN y apoyado por el UKDT, la iniciativa contó con una inversión de más de 800 millones de soles.
Las obras incluyeron la construcción de un canal de 20 km para conducir el agua de las inundaciones, la creación de diques y cruces de canales, 5 km de canales mejorados y una cascada de agua hacia el océano. Además, el proyecto generó más de 2,000 empleos directos, beneficiando a numerosas familias locales.
Magnitud y el impacto del proyecto
James Redman, director del programa UKDT, resaltó la magnitud y el impacto del proyecto:
“Una infraestructura de esta envergadura y nivel lleva tiempo planificar, diseñar y construir, para garantizar que ofrezca a las comunidades protección y oportunidades para las generaciones venideras. A través de un poderoso espíritu de colaboración y un compromiso compartido para acelerar el progreso, el UKDT, la ANIN, los líderes comunitarios y miles de trabajadores han creado un sistema de gestión del agua de estándares internacionales que se basa en las prácticas ancestrales de las que la región se enorgullece”, precisó Redman.
Reconocimiento y colaboración comunitaria
Gavin Cook, embajador del Reino Unido, felicitó a los equipos involucrados por los dos años de trabajo exitoso.
“El objetivo principal de esta asociación entre Perú y el Reino Unido es acelerar la creación de infraestructuras que protejan y mejoren la vida de las personas en Perú. Queda mucho por hacer, pero este es un momento para celebrar el éxito, no sólo en la entrega de una infraestructura de estándares internacionales, sino también en el desarrollo de la capacidad del país para gestionarse de forma independiente en el futuro”, mencionó.
La participación de la comunidad ha sido esencial en la gestión y ejecución del proyecto. Representantes de los diferentes centros poblados de Huanchaco y La Esperanza, liderados en su mayoría por mujeres, trabajaron conjuntamente en todo el sector, creando una fuerza común que permitió la continuidad del proyecto y brindando las facilidades necesarias para avanzar hacia un futuro con mayores oportunidades.
Rostros del Cambio: Testimonio comunitario
Para documentar y representar la historia del desarrollo de esta obra, el UKDT estrenó un cortometraje de la serie “Rostros del Cambio”. El film narra, desde la perspectiva de la comunidad y de una de sus líderes, Martha Gonzales, la importancia del proyecto Quebrada El León para los trujillanos. Gonzales expresó:
“He visto muchos otros proyectos que se planificaron y terminaron paralizándose sin llegar a concluirse. Como dirigentes, apoyamos el proyecto. Los barrios están fuera de la zona de peligro y ya no tenemos la incertidumbre de que los derrumbes puedan quitarnos aquello por lo que hemos luchado. Las zonas tendrán más valor y valdrá la pena invertir en carreteras, aceras y establecimientos. Mi sueño es que La Molina sea verde”.
¡Atención!
El proyecto Quebrada El León no solo representa una infraestructura vital para la protección contra inundaciones, sino también un ejemplo de colaboración internacional y comunitaria para el desarrollo sostenible y la mejora de la calidad de vida de miles de personas en La Libertad.
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