La decisión fue unánime. Los cinco miembros que conforman la Junta Nacional de Justicia, tras la inhabilitación de dos de sus integrantes, votaron por la destitución de Liz Patricia Benavides Vargas como fiscal suprema titular y fiscal de la Nación, por interferir en las investigaciones contra su hermana, la jueza Enma Benavides, entre otros cargos.
La Junta también destituyó a la jueza de la Corte de Justicia del Callao, Enma Benavides Vargas, hermana de la exfiscal de la Nación, y a la fiscal exfiscal suprema provisional, Azucena Solari Escobedo, por la irregular remoción de la fiscal suprema provisional Bersabeth Revilla Corrales.
Recordemos que Revilla tenía a su cargo la investigación contra la jueza Enma Benavides, acusada de liberar a sentenciados por tráfico de drogas a cambio de sobornos.
En su informe, la consejera ponente María Zavala Valladeres, señaló que Patricia Benavides cometió una falta muy grave en su actuación como fiscal de la Nación, al cambiar a la fiscal Bersabeth Revilla, y reemplazarla por Azucena Solari.
Benavides Vargas cesó a la fiscal Revilla con un informe de baja productividad, sin sustento, expresamente elaborados para justificar la remoción, pues la Oficina de Control de Productividad de los fiscales registró una alta producción, “superior al 90% en los años anteriores y 55% en lo que iba del 2022”, hasta antes de la remoción.
