En Junín, el 49.2% de niños fue diagnosticado con anemia y lo convierte en una región en alerta al tener casi a la mitad de sus niños con esta enfermedad por encima del promedio nacional. Redes destaca que se requiere un trabajo articulado entre las distintas entidades a fin de contrarrestar esta problemática.
A nivel nacional, la Red de Estudios para el Desarrollo (Redes) observó que la anemia infantil entre niños menores de 3 años alcanzó la cifra más alta en los últimos 5 años, con un registro de 43.1% en el 2023, según la Encuesta Nacional de Demografía y Salud (Endes).
Recordemos que, en los niños, la presencia de esta enfermedad genera problemas de comprensión lectora, dificultad para concentrarse y deficiente desarrollo psicomotor en la etapa infantil.
“La anemia tiene repercusiones en el futuro de los niños y, por ende, del país. La enfermedad repercute negativamente en su futura vida laboral, porque limita su productividad y los ingresos salariales que puedan tener”, explicó Giacomo Puccio, economista de Redes.
En el último año, 10 regiones tuvieron una prevalencia superior al 50% de anemia infantil y las regiones con las situaciones más críticas son Puno (70.4%), Ucayali (59.4%), Madre de Dios (58.3%) y Loreto (58.1%). Por el contrario, las regiones con las menores cifras de anemia infantil son Tacna (33.7%), Lambayeque (35.4%), Cajamarca (34.9%) y Lima Metropolitana (34.7%).
La insuficiencia de glóbulos rojos, ocasionada por una deficiencia de hierro en el organismo, limita la producción de proteínas que contribuyen con el crecimiento de las personas. Los alimentos altos en hierro para bebés a partir de los 6 meses son bazo, sangrecita e hígado. A partir de los 8 meses se puede incorporar pescado y menestras.