Producto de las intensas lluvias reportadas en la región Junín, el caudal del río Cunas se incrementó causando la destrucción total de dos viviendas en el distrito de Pilcomayo, sembríos y un canal de regadío en Chupaca. También un perro fue arrastrado por la corriente.
Vecinos fueron testigos de la destrucción de dos inmuebles ubicados en la ribera del río en Pilcomayo. Primero, desde las tres de la mañana empezó a derrumbarse la vivienda de la señora Margarita Ureta Ángeles, donde vivían su padre, su hija y sus dos nietos.
La familia logró salvar algunas de sus pertenencias, pero sus ahorros y su casa de adobe se perdieron en la aguas del río Cunas, que carcome el terreno.
Alrededor de las 6:00 de la tarde, la vivienda de la familia Santana y otras dos familias, corrió con la misma suerte.
La construcción de cemento y ladrillos, ubicada a menos de 500 metros de la primera casa siniestrada, se desmoronó, pese al pronóstico de funcionarios de la municipalidad de Pilcomayo y de la propia familia afectada, de que al menos hoy no cedería su casa.
Tristemente, el río no solo provocó pérdidas materiales, si no que también arrastró a una perrita negra preñada que se presume perdió la vida.
Los vecinos solo pudieron registrar los últimos minutos del can en video, ya que los deslizamientos de tierra constantes impedían acciones de rescate.
En este sector, paradero 5 de Pilcomayo, cerca a la exuniversidad Alas Peruanas, existen al menos otras tres viviendas que también podrían quedar destruidas, pues el terreno que las separa de la corriente se ha reducido alrededor de 24 metros en cuestión de horas.
Chupaca
Del otro lado del río, frente a las dos casas destruidas, el terreno pertenece al distrito de Huamancaca Chico, en la provincia de Chupaca.
Aquí, el río Cunas destruyó las conexiones de un canal de regadío que servía a varios agricultores para regar sus cultivos de maíz, papa y alfalfa, que también fueron arrastrados por la corriente.
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