Un policía de investigaciones fue detenido como presunto integrante de una banda criminal dedicada al robo agravado, luego que montara una falsa intervención policial, junto a once hombres y un supuesto fiscal, para ingresar a un edificio de seis pisos en el barrio Pishupyacum, en el distrito de Chilca, en Huancayo.
Los sujetos irrumpieron de manera violenta en el lujoso inmueble sin ninguna orden judicial.
De acuerdo con la denuncia de la agricultora Marina Taipe Asto (43), que se encarga del cuidado del inmueble, los sujetos llegaron a bordo de un auto y un camión el lunes último, a las 2:30 de la mañana y, tras forzar la puerta metálica con patas de cabras ingresaron al primer y segundo piso, con el cuento de que buscaban a un requisitoriado.
Yulissa Taipe Vicaña (28), sobrina de Marina Taipe, contó que tres hombres vestidos con uniforme policial fueron los primeros en ingresar a los cuartos y revisaron hasta los muebles de la habitación, mientras que los otros 10 hombres de civil brindaban seguridad cubriéndose el rostro.
Un hombre con barba que se hacía pasar por fiscal trataba de calmar a los ocupantes y les pidió que no tomaran fotos ni grabaran. Lo extraño fue que no se llevaron nada, más que el celular de la joven que registró el rostro de los sujetos.
Marina, natural de Huanta (Ayacucho) dijo que el lujoso edificio, con puertas talladas de madera, pisos enchapados, cochera, entre otras características, es de un amigo de su hija y que vive en la selva central.
Detienen a policía
La agraviada denunció el hecho ante la PNP mostrando imágenes, cuyos efectivos identificaron a uno de los agentes que ingresó ilegalmente al edificio como el suboficial técnico de segunda Moisés Arturo Arellano Mejía (57), de la unidad de Crimen Organizado de Huancayo.
El policía se encuentra detenido por el presunto delito de robo agravado, allanamiento ilegal de domicilio, abuso de autoridad y usurpación de funciones. De acuerdo a un oficial de la PNP, ese día el efectivo se encontraba de servicio.
En las investigaciones, el policía se acogió al silencio. El celular, finalmente, se perdió.
En el 2017, Arellano Mejía fue acusado de integrar una banda criminal de policías y civiles que ‘sembraban’ drogas y armas a los detenidos. La policía continúa con las indagaciones a fin de identificar a los otros hombres que irrumpieron en el inmueble.