Cuatro vehículos compactadores, al parecer con su respectiva carga de residuos sólidos, permanecían estacionados a las 9 de mañana de este miércoles, en el canchón donde funciona el área de Limpieza Pública de El Tambo; mientras el jefe de esta área, Ricardo Flores, mantenía una reunión con otros funcionarios municipales.
Uno de esos camiones, identificado con la placa AME 943, por su antigüedad está inoperativo y fuera de servicio. “Es prácticamente una reliquia de limpieza pública”, explica Flores, quien lleva cinco días en el cargo.
A otro camión recolector le hace falta una bomba hidráulica para que funcione correctamente. Flores explica a Huanca York Times que ese repuesto no existe en Huancayo y por eso fue enviado a Lima para su reparación. “En un par de dúas [el compactador] estará operativo”, asegura.
A otro vehículo le falta un “pin”, dice el funcionario y señala que, en total, cinco unidades se encargan del recojo de los residuos.
En el canchón hay también dos camionetas más pequeñas, que “ya están pasando al retiro, porque son más gasto que productivos”.
Además de estos vehículos, el servicio de limpieza pública está compuesto por unos 50 trabajadores, pero para la población de El Tambo, que bordea los 200 mil habitantes, son insuficientes, argumenta Ricardo Flores, quien también es un personal de planta, designado esta vez como jefe de Limpieza Pública.
Finalmente, Flores admite que hay deficiencias en esta área, pero son superables, con el refuerzo de personal de otras áreas que se incorporarán a limpieza pública.
