Adelanto de elecciones pide Estados Unidos

En esa línea va también la posición de la OEA, subrayando que la mejor salida para la crisis peruana es el adelanto de las elecciones, toda vez que este Congreso y la presidenta Dina Boluarte son autoridades deslegitimadas.
Periodista Jorge Ponce
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Es tan grave la crisis política en la que se encuentra sumida el Perú, que el gobierno de los Estados Unidos, a través del subsecretario del Departamento de Estado, Brian Nichols, se ha pronunciado invocando a que el Poder Ejecutivo y el Legislativo se pongan de acuerdo para adelantar las elecciones.

“La administración de Joe Biden observa atentamente los acontecimientos en el Perú y apoya los esfuerzos para impulsar el orden democrático en el país”, se lee en dicha declaración.

Indudablemente que el informe de investigación de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos que establece una grave violación de estos derechos en la matanza de más de 60 personas, ha remecido los cimientos del gobierno peruano y obligado a la superpotencia del norte a pronunciarse.

Pero, como era de esperarse, congresistas de casi todas las bancadas saltaron como un resorte, rechazando el llamado del gobierno estadounidense, calificándolo de interferencia en los asuntos internos del Perú y al cual no tienen derecho.

 

“La invocación de los Estados Unidos no significa una interferencia política, puesto que la defensa de los derechos humanos y de la democracia son valores universales que trascienden las fronteras nacionales”

 

Sin embargo, no faltaron especialistas en Derecho Internacional puntualizando que la invocación de los Estados Unidos no significa una interferencia política, puesto que la defensa de los derechos humanos y de la democracia son valores universales que trascienden las fronteras nacionales.

Es en esa línea en la que va también la posición de la OEA, subrayando que la mejor salida para la crisis peruana es el adelanto de las elecciones, toda vez que este Congreso y la presidenta Dina Boluarte son autoridades deslegitimadas y repudiadas por el pueblo.

No obstante, el llamado de los EE.UU. sobre el Perú no es gratuito y tiene también sus aristas políticas interesadas. Veamos:

  1. No olvidemos que el País del Norte siempre consideró a Latinoamérica como “su patio trasero” y que no debe escapar a su dominio político. Más aún cuando la mayoría de países de América Latina defendieron su independencia y soberanía en la última cita de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), así como se negaron a seguir los dictados de los EE.UU. en el conflicto de Ucrania.
  2. Otro elemento cardinal es la creciente influencia que va teniendo en AL China y Rusia, principalmente en el campo económico, el cual no es visto con buenos ojos por EE.UU. y a los cuales considera como sus enemigos; y,
  3. El régimen de Joe Biden quiere que la salida de la crisis política en el Perú no tome ribetes radicales por parte del pueblo, sino más bien democrático-electorales y pacíficas que guarden las formas. Salvo mejor parecer.