Más de 4 mil cabezas de ganado entre alpacas, ovinos y vacunos han fallecido en la zona alto andina de la provincia de Huancavelica, a causa de la escasez de agua, por ausencia de las lluvias, según ganaderos alpaqueros de esta provincia, quienes piden que se declare en emergencia ese sector.
Las cabeceras de cuenca, ojos de agua y riachuelos están completamente secos. El ganado no encuentra pasto en las alturas ni agua y tiene que viajar largas distancias para sobrevivir.
La historia de cada ganadero es más triste que la otra. En la estancia de doña Justina Benito encontrado los restos de un aborto ocurrido en la madrugada, los pellejos de otras alpacas muertas días antes y los huesos en el campo.
Justina Benito, es de la Zona de los Pastales de Huando donde ha tenido por lo menos 40 alpacas muertas que se traduce en una pérdida económica de 12 mil soles en lo que va del año, por las bajas temperaturas, la escasez de agua y pasto. De los sobrevivientes un gran porcentaje están flacos y su carne tampoco puede ser negociables, y si mueren no tienen opción que darles a los perros para que se coman los huesos.
Otro es el caso de la viuda Marcelina Benito que tiene que mantener a sus hijos con la crianza de alpacas, pero la temporada de sequía que se vive en Huancavelica está siendo muy dura para todos sin discriminaciones.
Marcelina se dio con la sorpresa de encontrar una alpaca adulta muerta y un recién nacido en su corral, lo que la entristece porque su único ingreso económico es a base de su ganado que ve morir cada día sin poder hacer nada ante los embates de la naturaleza.
Según el calendario de lluvias que manejan, los ganaderos y agricultura para estas fechas ya debía haber presencia de lluvias, sin embargo la sequía continua prolongándose, generando gran preocupación.
A estas alturas del año los ganaderos exigen a las autoridades atender su necesidad con medidas paliativas que puedan solucionar el problema a corto plazo y posteriormente desarrollar proyectos a largo plazo como la siembra y cosecha de agua para atender a la población en situaciones como está, que se producirán con mayor frecuencia a posteriori, que será inevitable por el cambio climático.
En la comunidad de San José de Acobambilla, donde logramos evidenciar el trayecto de las alpacas en búsqueda de agua que bajan a las faldas de los cerros para encontrar el líquido elemento, para sobrevivir. Aunque no todos tienen la misma suerte cómo está vaca que murió en el intento.
Algunas organizaciones alpaqueras de Huancavelica calculan la muerte de 25 mil cabezas de alpacas en toda la región.