Un desalojo se salió de control la mañana de este jueves 15 de mayo en el distrito de Chontabamba, provincia de Oxapampa, debido a que los policías asignados a la diligencia se quedaron sin bombas lacrimógenas, sin cascos ni escudos suficientes para contener los disturbios. Con municiones limitadas, el operativo tuvo que ser suspendido.
La diligencia, dispuesta por una orden judicial para liberar un predio ocupado desde hace varios años, fue encabezada por el juez de Investigación Preparatoria César Guardía Huamaní. El terreno está en disputa entre la Asociación de Vivienda La Orilla y la Municipalidad Distrital de Chontabamba, representada por el alcalde Cristhian Paredes Romero.
Apenas comenzó el desalojo, los ocupantes respondieron con violencia, lanzando piedras contra los efectivos. Al estar desprovistos de implementos antidisturbios, los policías recurrieron al uso de sus armas de reglamento, efectuando disparos al aire e incluso lanzando piedras en defensa propia.
En medio del caos, un grupo de invasores con el rostro cubierto incendió dos maquinarias pesadas de propiedad de la Municipalidad de Chontabamba, que participaban en la demolición de las viviendas, además de una motocarga. Ante la gravedad de los hechos y la falta de condiciones, el juez decidió suspender la diligencia.
“Viendo las circunstancias, es mejor suspender para evitar cualquier daño. La Policía tampoco tiene bombas lacrimógenas. Una máquina se malogró”, afirmó el magistrado al anunciar la decisión.
Aunque la orden judicial cuenta con la ratificación de la Corte Suprema, el operativo quedó en suspenso por razones de seguridad. Los ocupantes continúan en el predio.