Un grupo de ciudadanos del distrito de Chongos Alto, en la provincia de Huancayo, llegaron hasta la plaza Huamanmarca, para rechazar los maltratos a los que, aseguran, fueron sometidos por miembros de la Policía Nacional, cuando se manifestaban en contra de la contaminación ambiental que atribuyen a la mina Corihuarmi, ubicada a unos cinco mil metros sobre el nivel del mar, entre los límites de Junín y Lima.
Manifestantes entrevistados por Huanca York Times, señalaron que ingresaron a la zona el pasado jueves 27 de enero, en protesta por la contaminación ambiental que afecta pastizales y cuerpos de agua.
Pero Isaú Huamán Maraví, uno de los manifestantes, señaló a este medio que ingresó al lugar porque el terreno es suyo. “Mis padres han comprado y me han dejado como herencia, y a mis hermanas”, aseguró a este medio. “Hemos ido para reclamar a la minera por el medio ambiente, pero no nos han hecho caso”, agregó.
Relató que en un primer momento comuneros de Huantán, comunidad del distrito de Yauyos, perteneciente a Lima provincias, se acercaron al lugar y luego se retiraron. De forma similar procedieron policías de la comisaría de Chongos Alto, quienes también se retiraron. Pero el sábado 29 llegó personal de la comisaría de Yauyos, los intervino y los trasladaron por la fuerza a su sede.
Huamán señaló, además, que ha sido denunciado por la empresa minera por usurpación de los terrenos que él reclama como suyos.
Para minera, es una usurpación
Por su parte, la empresa Minera IRL SA, dueña de la mina de oro Corihuarmi, calificó los hechos como una “usurpación”, pues desconoce la propiedad sobre parte de los terrenos que Isaú Huamám y otros protestantes alegan. También niega que sea la causante de contaminación ambiental.
Magaly Villena Tapia, responsable de comunicación de la empresa, sostuvo que son tres las familias que reclaman la propiedad de una parte de los terrenos donde opera Corihuarmi y, basada en un video de los protestantes, afirmó que ingresaron con “violencia” a la operación de la minera. La demanda por la propiedad reclamada, se encuentra en un proceso judicial.
Segú Villena, la mina Corihuarmi se ubica en terrenos de las comunidades de Atcas y Huantan, de la jurisdicción de Yauyos, quienes desde 2004 mantienen un contrato de uso de servidumbre de terrenos superficiales. Atcas, agregó, es propietaria de 29,370 hectáreas, inscrita en los Registros Públicos.
Villena también negó que en el proceso de extracción del oro, Corihuarmi contamine al ambiente, porque recircula el agua que emplea.
Un antecedente
Sin embargo, las denuncias por contaminación ambiental causadas presuntamente por la unidad minera Corihuarmi, no son recientes. En enero de 2020, la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental de Huancayo y la Autoridad Nacional del Agua (ANA), acudieron a una emergencia ambiental por vertimiento de aguas ácidas en los afluentes de la zona de Canipaco, tal como reportó el portal Actualidad Ambiental.
El Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) del Ministerio del Ambiente, también acudió a la zona.
Un tercer reporte de peligro del Instituto de Defensa Civil (Indeci), reportó, consignó la situación de esta forma:
Reporte de Peligro Inminente Nº 025 7feb2020 Contaminación Ambiental en El Distrito de Chongos Alto Junín 3… by Huanca York Times on Scribd