Decenas de policías ingresaron con ayuda de una tanqueta que derribó la puerta de ingreso N° 3, al campus de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, para desalojar a los manifestantes que llegaron desde Cusco y otras regiones del sur a Lima hace tres días para protestar contra la presidenta Dina Boluarte.
Cerca a las 9:30 de la mañana, los policcíasn irrumpieron en el campus, intervinieron a las personas que estaban dentro y las redujeron, instándolas a estar boca abajo, sobre el pavimento. Luego, procedieron a revisar y desocupar las habitaciones de la residencia universitaria. Algunos alumnos grabaron videos, se registró la desesperación de estos y la ausencia de fiscales.
Desde el exterior, algunos abogados intentaron ingresar para brindar apoyo legal de alumnos y manifestantes intervenidos, pero los agentes del orden les impidieron el ingreso. Casi al mediodía, el Ministerio Público recién indicó que fiscales de Prevención del Delito se estaban acercando a la casa de estudios.
A través de un comunicado, el Ministerio del Interior indicó que su actuación se dio luego de recibir una denuncia del apoderado judicial de la universidad. A su vez, la oficina de Imagen Institucional de San Marcos dijo que el pasado viernes 20, siete manifestantes que estaban dentro de la universidad agredieron a los vigilantes para quitarles sus chalecos y aparatos electrónicos.
Manifestantes alojados
La madrugada del 18 de enero, buses de manifestantes ingresaron gracias a que un grupo de alumnos tomaron la universidad pidiendo que alojen a los peruanos provenientes principalmente del sur.
Al día siguiente, la rectora Jeri Ramón Ruffner comentó que el Consejo Universitario no accedió a alojar a los manifestantes y que “se deben retirar al mediodía”, luego de salir a la movilización, los pobladores de Cusco y otras regiones volvieron a ingresar.
En la tarde de este sábado 21 de enero, Ramón Ruffner afirmó: “No podíamos dejar de denunciar lo que pasaba en la universidad”, refiriendose al hecho denuciado.
Frente a estos hechos la Asamblea Estudiantil de San Marcos solicitó, a través de un pronunciamiento, la vacancia de la autoridad universitaria.