El Centro de Salud del distrito de Monzón, en la provincia de Huamalíes, permanece paralizado desde el año 2021. Los pobladores y autoridades locales reclaman la falta de avances en una obra que consideran indispensable para garantizar la atención médica en una zona donde viven más de 19 mil habitantes.
El presidente de la junta vecinal de Pistaloli, Hipólito Serna Romero, lamentó que las promesas del Gobierno Regional de Huánuco no se hayan cumplido. Según relató, el proyecto comenzó durante la gestión del anterior gobierno regional, pero hasta la fecha no se ha retomado. “Nos dijeron que había presupuesto para continuar, pero todo quedó en palabras. No hay voluntad política, y el pueblo se siente engañado”, expresó Serna.
El dirigente denunció además fallas estructurales en la obra inconclusa. “Hay dos pabellones que parecen coladeras, están chorreando agua y en riesgo de colapsar. Hicimos las observaciones, pero nadie se hace responsable”, afirmó. La falta de supervisión técnica y de seguimiento institucional, añadió, ha generado desconfianza entre los vecinos.

Un centro que no cubre la demanda local
Actualmente, el establecimiento de salud de Monzón funciona con una infraestructura limitada y sin atención nocturna. Las emergencias deben ser derivadas a Tingo María, a más de dos horas de distancia. Serna señaló que este déficit de atención pone en riesgo la vida de los habitantes. “Si alguien se enferma de noche, no hay a quién acudir. La atención termina a las siete y después nadie atiende. Estamos abandonados”, denunció.
La falta de supervisión técnica y de seguimiento institucional, añadió, ha generado desconfianza entre los vecinos. (Foto: Inforegión)
El dirigente vecinal pidió que se habilite un turno médico nocturno y que se priorice la culminación del centro. “Monzón necesita un establecimiento operativo las 24 horas. No es un capricho, es una urgencia por la cantidad de personas que atendemos”, insistió.
Reformulación del expediente y promesas de reactivación
Desde el sector salud, el jefe del Centro de Salud de Monzón, Saúl Romero Aguirre Loarte, explicó que el expediente técnico se encuentra en proceso de reformulación. El documento inicial presentó fallas en los servicios básicos, pues se había asumido que la localidad contaba con agua, desagüe y energía eléctrica, lo que no era cierto. “El expediente inicial tuvo errores. Por eso se está corrigiendo y el nuevo documento ya está próximo a ser licitado para reiniciar la obra”, señaló Romero.
El funcionario precisó que la futura infraestructura permitirá que el establecimiento pase de categoría I-3 a I-4, lo que posibilitará una atención médica las 24 horas del día. “Con el nuevo centro y su equipamiento podremos atender partos, emergencias y accidentes sin depender de otros hospitales”, sostuvo.
Actualmente, el centro cuenta con tres médicos generales, cuatro obstetras y una ambulancia operativa, pero los recursos son insuficientes frente a la demanda. Romero comentó que atienden a más de 7 mil personas, incluyendo comunidades aledañas.
El funcionario precisó que la futura infraestructura permitirá que el establecimiento pase de categoría I-3 a I-4. (Foto: Inforegión)
Expectativas frente a una reunión clave
Este 7 de noviembre, las autoridades locales y del sector salud sostendrán una reunión en Huánuco para definir el estado real de la obra y su posible reapertura. El jefe del establecimiento confía en que esta vez el compromiso se cumpla. “Ya pasaron tres gobernadores y más de tres años de espera. Es momento de que se concrete la construcción. No podemos seguir sin resultados”, enfatizó.
Mientras tanto, los vecinos continúan presionando para que el proyecto no quede en el olvido. En Monzón, la frustración crece al mismo ritmo que el deterioro de una obra que debía ser símbolo de progreso, pero que hoy refleja el abandono de todo un distrito.
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