Nueve comunidades indígenas asentadas en la provincia de Satipo, en la región Junín, recibieron sus títulos de propiedad, que les dará seguridad jurídica en el desarrollo de sus actividades productivas, pues sus territorios tienen aptitud para pastos, la ganadería, actividades de forestación y tierras de protección de bosques y biodiversidad.
Las nueve comunidades nativas asháninkas suman una extensión de 46 mil hectáreas con 980 metros cuadrados. Ellas son:
- Alto San Pascual (290 ha),
- Cañete (339 ha),
- Santa Rosa De Kiriarin (21 ha),
- Nuevo Ashaninka (3000 ha),
- Nomatsigenga Otisi (3814 ha),
- Yupanqui (14 ha),
- Pampa Rosas (227 ha),
- Alto Santa Elena (41 ha),
- Santa Rosita De Shirintiar (6305 ha).
La Dirección Regional de Agricultura informó que también entregó documentación del proceso de titulación de las comunidades Alto Sondoveni, en Satipo, y Marontuaro, en el distrito de Pampa Hermosa, así como la resolución de reconocimiento a la comunidad nativa Korishato del distrito de Pangoa.
Estas comunidades se dedican al cultivo de cacao, café, cítricos, achiote, maíz, yuca y plátano, así como la crianza de animales domésticos, la pesca y la caza.