Con huaylarsh y llanto fue despedida Thalía Inga Quispe (25), la joven asesinada de un balazo en un asalto en la carretera Huancayo – Surcubamba, en el poblado de Huari, en Huancavelica, cuando viajaba con su mamá y su hija de tres años, la noche del último domingo.
La conmovedora escena en el sepelio que se realizó este miércoles, en el camposanto de Chupaca, fue cuando su cuñado le dedicó el último huaylarsh frente a su féretro.
Acompañado de una orquesta folclórica, el joven se puso al lado del ataud y bailó por última vez con Thalía, extendiendo los brazos.
“Te irás bailando tu rico huaylarsh”, exclamó antes de iniciar el zapateo con alegría, pero con una honda pena en el corazón.
La mamá de la víctima, la profesora Mery Quispe Mendoza, también ha quedado desamparada tras la partida de su hija. “Era mi brazo derecho”, dijo sollozando. “No sé que haré sin ti”. Se lamentó.
El esposo de la joven se despidió con un ramo de rosas blancas. “Cuidaré de nuestra hija”, le dijo.
El asalto se registró el último domingo 22 de mayo. Seis delincuentes cerraron la carretera en la cumbre de Huari. La camioneta en la que viajaba Thalia escapó del atraco y pero ella alcanzada por un proyectil disparado por los delincuentes.
Thalía fue trasladada a un centro de salud y luego al hospital de Essalud de Huancayo, donde falleció a las pocas horas. Ella, acompañaba a su mamá, quien enseña en la escuela del anexo de Chuyapata, en el distrito de Salcabamba, en Huancavelica.
Julio César Sáez Requena, director regional de Educación de Huancavelica, pidió mayor seguridad en las carreteras de zona nororiente de Tayacaja, donde un grueso número de docentes imparten clases en comunidades.
