Luego de 30 días de intensa búsqueda por familiares, amistades y personal policial especializado de Lima, el último domingo fueron hallados, al fin, los cuerpos de los esposos Contreras Inga, aprisionados entre los fierros retorcidos de la camioneta Mahindra con el que se precipitaron al río Mantaro.
El pasado seis de abril, Yefri Contreras Inga (35) emprendió el viaje de Lima con destino a San Pedro de Saño, en Huancayo, junto a sus padres Víctor Contreras Vélez (68) y Gertrudis Inga Rodríguez (67), para celebrar los carnavales,
Yefri era el padrino de la fiesta, pero a la altura del puente de Llocllapampa, en la carretera Central, entre La Oroya y Jauja, con la camioneta cayeron por una pendiente al río, desapareciendo por completo.
Primer Hallazgo
Para el 8 de abril, los familiares encontraron el cuerpo de Yefri en un islote del río Mantaro a la dirección de un vivero, por Muqui. Sus padres quedaron como desaparecidos.
Desde entonces los hijos Contreras Inga, en compañía de sus familiares, amistades y autoridades de Saño ,no cesaron en su diaria búsqueda con rezos, plegarias, con un rosario morado en sus pechos, realizando ritos de ofrendas al río, para hallar a sus seres queridos. No escatimaron grandes esfuerzos.
Hasta que el último sábado, policías de la Brigada de Salvataje y Rescate Acuático de Lima, ubicaron la carrocería sumergida en las aguas del río Mantaro, a 300 metros del lugar donde cayó el vehículo, y a una profundidad de 120 metros de la orilla izquierda.
La mañana de este domingo, cinco de mayo, con maniobras de buceo scuba y a pulmón libre, los brigadistas engancharon la camioneta siniestrada y la remolcaron hasta la orilla del río Mantaro. Luego, con una grúa, la movieron hasta la carretera. En la recuperación de la unidad, convertida en chatarra, apoyaron a la Brigada de Rescate y Salvataje Acuático de Lima, los policías de rescate de las comisarías de Huancayo, Llocllapampa, Pachacayo y Jauja.
Entre los fierros retorcidos estaban los cuerpos de las personas desaparecidas, quienes fueron reconocidos por su hija Jovana Contreras Inga. Los restos serán al fin velados y sepultados cristianamente, junto al de su hijo Yefri, en Saño; y descansar en paz.
“Misión cumplida”
Los cuatro integrantes de la Brigada de Rescate y Salvataje Acuático de la policía de Lima cumplieron con su palabra. A su llegada, el diez de abril, manifestaron: “No nos iremos hasta encontrar los cuerpos y brindar consuelo a los familiares”.
Al mando del suboficial Trevejo Oropeza, Jhonny (jefe de buzos), el ST2 Baca Rojas, Edgar; el ST1 Navarro Astuñaupa, Elver y el S1 Quintanilla Huamán, Wilder durante 26 días buscaban, junto a la familia, a los desaparecidos. Ahora retornan a su base en la costa marítima del Lima, con la satisfacción de manifestar: “Misión cumplida”.
