La Policía Nacional detuvo el martes último a Yeison Lucano Leyva, de 25 años, en el hospedaje Mercedes, en Satipo, donde se hallaba oculto y pretendía huir tras incrustarle estacas en la cabeza a una niña de 11 años, a quien habría intentado violar sexualmente en Atalaya (Ucayali).
El sujeto fue puesto a disposición de la comisaría de Ucayali, luego que el Juzgado de Investigación Preparatoria de Atalaya ordenara su detención preliminar por tres días, puesto que investigado por el delito de feminicidio en grado de tentativa en agravio de una adolescente de 11 años.
El juez de paz Jesús Pacheco Vásquez informó que los hechos ocurrieron en la vivienda de la menor, ubicada en el centro poblado Oventeni, en la provincia de Atalaya. El padre de la adolescente la encontró convulsionando, con los pantalones abajo y signos de haber sufrido violencia en todo el cuerpo, por lo que las autoridades presumen que fue víctima de violación.
“Sospechamos que fue su primo (Yeison Lucano), como fugó los familiares lo responsabilizaron, pues cuando pasó el hecho el joven desapareció, estaba escapando rumbo a Satipo y lo detuvieron a la 1 de la mañana”, precisó Pacheco Vásquez a la Agencia Andina.
El hospedaje Las Mercedes se encuentra en la carretera Marginal Satipo-Río Negro. Cuando policías de la comisaría de Satipo llegaron al hospedaje, Lucano intentó escapar, pero lo redujeron y lo detuvieron en una de las habitaciones.
Como parte de las investigaciones, la Fiscalía Penal Corporativa de Atalaya realizarán el reconocimiento médico legal de la víctima, la toma de declaraciones del investigado y los testigos, así como la inspección técnico-policial y la entrevista a la víctima.
El padre de la menor la encontró convulsionando al interior de su vivienda y la trasladó al hospital Manuel Higa Arakaki de Satipo y luego, por la gravedad de su estado de salud, al hospital del Niño en Lima.
La directora del Hospital del Niño de San Borja, Zulema Tomas Gonzales, le dijo a Andina que la niña se encuentra internada en la unidad de cuidados intensivos y que le incrustaron en la cabeza objetos punzocortantes: estacas metálicas y no clavos como se informó en un primer momento.
El diagnóstico indica que la menor tiene traumatismo intracraneal no específico, fractura de la bóveda de cráneo, edema cerebral y comprensión del encéfalo; además, le encontraron lesiones en la zona abdominal. Aunque su estado es estable, el pronóstico es reservado.
